18 de febrero de 2013

1/2 Maratón de Barcelona: Viacrucis para hacer el porras

                                 Fuente: www.labolsadelcorredor.com

Ayer Domingo 17 de febrero disputé la 1/2 maratón de Barcelona. Una carrera que tenía muchas ganas de disputar, y a la que me hubiera gustado llegar en plena facultades para poder hacer un buen tiempo, ya que el recorrido invitaba a ello. 

Después de la carrera de Badalona en la que me encontré muy bien y sin molestias, pensaba que esto ya estaba superado, que solo tenía que seguir cuidándome, hacer una semana muy tranquila para no recaer y que la media de ayer iba a ser un buen día. Me equivoqué. Salí 2 días a rodar, 5km sin mucha molestia. Algún punto, pero nada importante, y sobretodo mucho mejor que las semanas anteriores. El sábado recogí el dorsal. 24 euros que vale la carrerita. Ahí es nada. Y en la bolsa del corredor una camiseta y una medalla, plátanos y mandarinas al llegar a meta. Para mi excesivo.

Ayer domingo, pese a las previsiones de lluvia el día aguanto muy bien. Buena temperatura para correr y sin aire. Perfecto para hacer una buena carrera. A las 8:00 llegaba a la zona del guardarropa, me cambié como un rayo y me puse a hacer una cola kilométrica para poder dejar la mochila. Estuve desde las 8:10 hasta las 8:25 que pude dejar las cosas. Y yo aun tuve suerte, porque cuando salí del guardarropa, y faltando solo 20 minutos para la salida la cola rodeaba media estación del norte. Pagando 24 euros me parece un desastre absoluto. Entiendo que la gente espera hasta última hora para dejar las cosas, pero es lo normal y algo que la organización debe tener controlado y planificado. Lo que no hará la gente es ir a las 7 de la mañana y estar 2 horas calentando para no coger frío.

A las 8:45 en punto se daba la salida a la carrera. Una salida perfecta y rápida con muchisima gente animando. Hice la misma salida que en la media de Sitges. Primer km en 3:30 y ahí ya a dejarse caer. Cogí mi ritmo, no entre ni quise entrar con ningún grupito de los que ya se iban haciendo y de esta manera llegué al km 5 que lo pasé en 18:20. La verdad es que iba muy cómodo, y tenía que ser así, porque no se me hizo larga la Gran Vía. No me di ni cuenta que estaba ya girando para Arco de Triunfo. Llegados a este punto de carrera, venía todo estiradisimo y muy roto. Algún grupo de 4 o 5, otros 2, otro solo, como era mi caso. Yo seguía a lo mio con un ritmo constante y sin cebarme en ningún momento cuando en una ligerísima subidita sobre el km 9 me hacía notarme por primera vez el sóleo. No parecía nada importante, quizás solo una mala pisada, pero aun así y viendo de donde venía empecé a comerme la cabeza. Al paso por el km 10 pasé el segundo 5.000 en 18:29 muy parecido al primero y con un tiempo del 10 en 36:49. Ya llegando al paso del km 11 y en la subidita para coger Gran Vía a la altura casi de Bac de Roda, vuelvo a notar el sóleo. Algo así como, "Hola soy el sóleo y estoy aquí por si lo has olvidado", mucho más prudente y notando que empiezo a cargarme llego al paso por el km 12. Seguía manteniendo un buen ritmo y al girar en prim en busca del km 13 en una ligera bajada el sóleo me pega un pinchazo que me deja tieso. Cogeo unos 100 m y veo que no puedo. Me paro, doy media vuelta y me voy caminando hasta el giro de prim donde estaba mi madre y mi abuelo. Ya veía que ahí se acababa mi carrera. Me siento en un banco, intento centrarme, relajarme y pensar.Con la idea de pedir la targeta del metro y volverme a meta. Me levanto, estiro un poco y sigo caminando. Pruebo a trotar y decido seguir. A ritmo de paseo, pero sigo. Hice un reset, replantee la carrera. Solo tenía que acabar y sumar. Sin forzar pero acabar. Poco a poco voy pasando a gente y llego a la altura de mi amigo Marc. Nos saludamos, me pregunta que como va mi pierna a lo que respondo que mal. Voy un poco más adelante. Paso el km 15 corriendo entre la multitud hasta llegar el km 17 donde hago otra paradiña. Camino un rato y vuelvo a intentar estirar. Vuelve a llegar mi amigo Marc a mi altura, y me comenta que va en MMP. Así que decidí quedarme con el y acabar la carrera en buena compañía. Así los quilómetros se hacen más fáciles. A un buen ritmo para mi pierna nos íbamos acercando a meta. Al final 1h 25 min para acabar el 642 de la general. La peor carrera, y de largo de todas las que he hecho.

Por un lado contento con las sensaciones de los primeros 10, incluso de toda la media. Las piernas respondían. Una pena no poder comprobar hasta donde hubiera podido llegar. Quizás hubiera petado en el km 17, o 18. No lo se. Pero iba en tiempos de 1h18. Quizás por eso la fustración y la rabia que tenía dentro cuando tuve que pararme. Ahora a seguir, hacer la última prueba en la media del Prat y decidir si hago o no la Maratón.

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