11 de junio de 2012

Cursa de la Maquinista: Bienvenido señor del mazo


Después de 1 mes sin competir, ayer volví a ponerme las bambas para disputar la carrera de la Maquinista de 10 km. Posiblemente la carrera que menos me ha gustado de las que he hecho hasta el momento, seguramente influido en parte por el mal día que tuve.

Como cada mañana de carrera me tocó meterme un madrugón importante. Para no perder la costumbre aun me sigo preguntando cuando suena el despertador, quien narices me manda a mi meterme en estas historias. Pero la cabra tira al monte y la salsita de la competición me encanta. Para no romper el ritual, paseo al perro y desayuno antes de salir de casa y a coger el metro. Al metro porque siempre me busco carreritas cerca de casa, y por suerte para mi hay muchas y buenas. Una vez allí, paseo por la Maquinista en busca del guardarropa, un poquito de cola para dejar la mochila y a calentar (calentar por decir algo, porque ya hacia calorcito, podría decir sobrecalentar).

Ya en la salida, lo mismo de siempre, uno saluda al otro y oír los entrenos de cada uno. Que si la semana pasada corrí en 36, que si en tal carrera corrieron en 35, pero bueno a ver como se da hoy porque con este calor... Lo típico en estos casos, ya preparando el terreno antes de la salida por si el motor gripa decirle al amiguete al llegar..."Ya te lo decía... que con este calor... pues claro he petado" jejejej esto lo hemos oído todos.

Por mi parte iba a pasar el ratillo, en 2 semanas he corrido 50 min si llega, así que no tocaba otra que sufrir. En la salida muchisima gente de nivel y como es habitual en estos caso toca salir con un petardo en el culo, y aun así no llevas ni 100m que ya ves a los primeros a lo lejos. Salí cómodo, sin forzar demasiado con la intención de ver como se iba dando la carrera, pero rápido . Y la cosa no debía ir muy bien, cuando los quilómetros no pasaban nunca. No quería forzar, iba marcándome una marcheta que en cuanto a ritmo cardiaco era muy correcta, pero las piernas iban por otro lado. Hay días que pasa esto. El corazón va fino, "vamos vamos dale un puntito más que voy fabuloso" y las piernas ponen los pies en el suelo, y nunca mejor dicho, van dando la voz de alarma "para para que llevamos 2km y parece que vayamos ya por el km 4 y de un momento a otro gripamos". Pues nada en este caso yo a mi marcheta, esperando que las piernas se desbloquearan. Ahí seguía con mi lucha interna entre piernas y corazón pasando por el km 5 en 18:08. El corazón ahí estaba eufórico. "Vaya paliza le estoy metiendo a las piernas, si es que voy como un tiro", pues nada, muy buen tiempo en el 5.000, buen tiempo para ser yo, y a seguir. A todo esto un calor importante. Llegando al km 5,5 llevaba las patas muy muy mal, de hecho se estaban planteando ir a la huelga, y ya en el km 6,5 patapam el tio del mazo escondido detrás de un arbol para atizarme con ganas y el isquio derecho, imagino que del susto, se me empieza a enrampar. Así que paro,camino un poco, estiro lo que puedo y como puedo y me vuelvo a poner en marcha, piano piano, y a volver a coger ritmo. Al llegar al km 7,5 empiezo a doblar gente tanto de la carrera de 10 km como a gente de la de 5. Yo sigo a lo mio, con mi tortura. Paso el km 8 y me pongo a rueda de un chico que venia a buen ritmo, haciendo gala del nombre, xupa rueda en acción. Seguíamos doblando gente sin parar. En el km 9 ya íbamos metidos dentro del pelotón en slalom para poder llegar a meta. Al final y tras un día desastroso, llegaba vacío de piernas, muy muy muy vacío, nunca he llegado tan mal, con un tiempo de 37:42 y el 56 de la general.

Ahora si que espero poder ir saliendo estos días. La semana que viene estaré en San Joan d'Espí. A ver como se da y espero que las sensaciones sean mejores, porque ayer me toco sufrir de lo lindo, aunque tengo la esperanza de que lo de ayer sirviera para quitarme la carbonilla de las piernas y para días futuros vayan mejor.

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