1 de septiembre de 2017

Cross Torredembarra y Vacaciones

Se acabó el descanso, y es momento de volver a la normalidad. 1 mes sin competir, con entrenos, menos de los que me hubiera gustado, pero algo he ido haciendo. La verdad que entrenar tanto tiempo sin competir no me gusta nada. Al final tener las referencias de la competición es lo que cuenta, y es lo que de verdad me hace ir mejorando. Hay gente que es capaz de sacar el 200% entrenando, y los entrenos le cunden, y en mi caso, por mucho que quiera, no soy capaz ni de acercarme al nivel de exigencia de la competición.


La última carrera antes del parón fue el cross de Torredembarra de 4,8km. Carrera en la que todas las categorías salíamos por separado. En seniors no seríamos más de 50 o 60 corredores, pero el nivel daba miedo, y si a eso le sumas un circuito juguetón a 4 vueltas, y en cada una de ellas 3 giros de 180º, podríamos decir que directamente te llevan al matadero. De hecho, creo que hacia mucho mucho tiempo, que no sufría tanto en carrera. Si hubiera sido una naranja, no me hubiera quedado ni la piel.
Circuito punteado azul el de los seniors a 4 vueltas
Como la carrera era por la tarde, y en zona de playa, el bañito matutino no podía faltar. Ni tampoco el rato de chiringuito. Solo me tomé una coca cola, tampoco me excedí, pero pasamos una mañana típica de playa. Muy de dominguero. Después comer, un rato de descanso y puesta en marcha para competir. Rodaje suave hasta la salida y calentamiento con Dani para conocer las trampas que escondía el recorrido. Un giro de 180º en subida...


No tenía muy claro como quería plantear la carrera. O meterme en batalla, si el ritmo era asumible, o dejarme caer si la cosa se ponía muy agresiva, y marcar mi ritmo. Eso me iba a tocar decidirlo sobre la marcha. Se daba la salida con 36 grados!!! Que locura. Salían a ritmo de 3 clavado, o 3 muy poco. Realmente salida a cuchillo, pero el grupo era de 7 u 8 corredores. Asombroso. Acabando la primera vuelta nos quedamos 5 en cabeza. El ritmo seguía siendo altísimo, y en cada giro de 180º me metían un castañazo, que me dejaban las piernas tiritando. Segunda vuelta, y seguíamos para bingo. Nadie cedía ni un metro, y ahí iba yo, cerrando el grupo pidiendo la hora, los minutos, los segundos... lo que hiciera falta. Otro giro de 180º y arreón. Que agonía. Aquí ya perdí unos metros, que pensé que no iba a recuperar. Incluso me sentí aliviado de poder hacer la carrera por mi lado, pero no. Volví a entrar, y me agarré al grupo con todo lo que tenía, entrando ya en la tercera vuelta. Esto de hacer la goma es una tortura máxima. Aguanté hasta el segundo giro de 180º y ahí ya se me fueron. No llegué a explotar del todo. Un poco sí, pero pude ir haciendo. Me coloqué 4º, con el 5º muy cerca. Aquí os dejo un vídeo de las 3 primeras vueltas realizado por Esther y editado por @fandeleslot

Di todo lo que tenía sin guardarme nada, pero a falta de 200 metros no tuve gas para cambiar de ritmo y luchar por mantener mi 4ª plaza. Me tuve que conformar con ser 5º, con un tiempo de 16:18 en los 4,85 km que sumó la carrera.

Llegada a meta  Fuente: Athleticevents



Acabé destrozadito. Entre el esfuerzo y el calor... Eso si, es una carrera, que aun pareciendo pequeña, hay un nivel muy bestia y el ambiente es muy chulo. La excusa perfecta para pasar un gran día de playa, y redondearlo con una carrerita en la que no hay presión de ningún tipo. 

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